Naturaleza para el Descanso y el Deporte
Naturaleza altiva y ensimismada al mismo tiempo, apta como ninguna para el descanso y el deporte, es oferta principal del municipio de Los Barrios de Luna. Senderismo entre chopos de ribera, avellanos, robledales, abedules, tejos - en el entorno de Mirantes hay bellos ejemplares de esta especie protegida -, sabinas hasta alcanzar las altitudes que permiten alargar la vista sobre valles y cadenas de montañas que, poco a poco, en planos secuenciales, van difuminándose en lontananza.
Caminos, los de Portilla, que se adentran en el sobrecogedor desfiladero de los Calderones, con verticales paredes y espectaculares estratigrafías geológicas.
Espeleología en las mil y una oquedades que las peñas esconden, algunas nunca exploradas y otras, como las de Mallo y Mirantes, tan profundas que “la piedra pierde su eco”.
Vela, motonáutica y otros deportes acuáticos sobre 15 kilómetros de embalse, tomando como epicentro el Club Náutico de León, en Mirantes.
Pesca - la trucha es reina - y caza menor son un buen complemento en las temporadas hábiles para ello.
Incluso curiosidades de la naturaleza, como la Fuente de las Horas, cerca de Barrios, invitarán al descanso en espera del agua manada cada cincuenta minutos por un periodo de otros tantos.
No será el Paraíso Terrenal, pero no falta quien asegura que en algún lugar situado en el entorno de Portilla, Sagüera, Vega de Los Caballeros, Mora, Los Barrios, Irede, Mallo, Mirantes y Miñera, Dios inició la separación de las tierras y las aguas
